Declaración de fe
1. Dios
Creemos que un único, verdadero, y santo Dios creó el universo y lo sustenta. Él está en todos lados, todo lo puede, y todo lo sabe. Existe desde la eternidad en tres personas – Padre, Hijo y Espíritu Santo (Gén. 1:1, Deut. 6:4, Isa. 44:8, Mat. 28:19-20, Jn. 10:30, Heb. 1:3).
2. Jesús
Creemos que Jesús es Dios. Él nació de una virgen, concebido por el Espíritu Santo, y vivió una vida sin pecado, demostrando su naturaleza divina. Después, murió inocentemente para pagar nuestra deuda y tres días más tarde resucitó, venciendo el poder de la muerte. Él es nuestro Salvador y el único camino al Padre (Isa. 7:14, Miq. 5:2, Mat. 1:23, Mar. 16:19, Luc. 1:34-35, Jn. 1:1-2, 8:58, 11:25, 1 Cor. 15:3-4, 1 Tim. 3:16, Heb. 1:8, 1 Jn. 1:2, Apo. 1:8).
3. Espíritu Santo
Creemos que la única manera de vivir una vida agradable a Dios es a través de su Espíritu. Hasta el día de hoy, el Espíritu Santo convence, regenera, habita, capacita, y empodera a los seguidores de Jesús con dones sobrenaturales para andar como Él anduvo (Hech. 1:8, 2 Cor. 3:18, Jn. 6:13, 14:16-17, 16:8-11, Rom. 8:26, 15:33, 1 Cor. 12:1-14:40, Heb. 9:14).
4. Pecado
Creemos que todo ser humano es pecador por voluntad y naturaleza. En consecuencia, el hombre está condenado a juicio, separado de Dios, y sin esperanza en sí mismo. Por su gracia, Dios perdona y regenera por medio de su Espíritu a todo el que se arrepiente y confiesa con fe que Jesús es su única salvación (Hech. 8:15-17, Efe. 2:1-3, 2:8-9, Rom. 3:23, 5:8, Tito 3:5).
5. Palabra
Creemos que la totalidad de la Biblia es la Palabra de Dios – inspirada, autoritativa, y sin error alguno. Su Palabra transforma nuestra manera de pensar. Por eso, la estudiamos verso por verso, desde Génesis hasta Apocalipsis (Isa. 28:13, Neh. 8:8, Jn. 17:17, 2 Tim. 3:16,-17, Heb. 4:12, 1 Ped. 1:23-25, 2 Ped. 1:3-4, 21).
6. Resurrección
Creemos que los seguidores de Jesús lo vieron ascender al cielo. De la misma manera, nosotros le veremos regresar a la Tierra para juzgarla. En aquel día, los muertos resucitarán para vida o muerte eterna (Mat. 16:27, Hech. 1:11, Apo. 19:11-16, 20:11-15).