Consejos de una madre piadosa

En el capítulo 31 de Proverbios el rey Lemuel comparte algunas de las enseñanzas de su madre que impactaron su vida.

En el proverbio se alcanza a ver que la madre del rey era una mujer presente, que se involucraba con la enseñanza, le advertía, cuidaba y guiaba. En los primeros versos se observan algunas advertencias y consejos.

La primera advertencia va dirigida a cuidarse de la inmoralidad que se podría encontrar en el ambiente de las cortes:

La segunda tiene que ver con cuidarse de los vicios que destruyen a los reyes y les hacen tener mal juicio. Específicamente menciona la borrachera, pero también puede incluir otros vicios:

En contraste, su madre le da consejos para gobernar correctamente, diciendo que sea justo, que vea por los necesitados y juzgue apropiadamente la causa de los más desfavorecidos. (Pr 31:8-9)

En estos versículos podemos observar el impacto que la enseñanza de los padres puede tener en la vida de los hijos. Las advertencias, consejos y guía de los padres, sin lugar a duda, impactarán la vida y formarán el carácter. Gracias a Dios por mujeres como la madre de Lemuel, que dan consejos sabios, advierten, cuidan y guían a sus hijos. Son madres presentes que, con su vida, ejemplo y enseñanzas, impactan no solo a su generación, sino a las generaciones por venir.

Dios quiera que, en un mundo donde cada vez es más común que otras personas cuiden, críen y enseñen a los pequeños, veamos la importancia de seguir el modelo bíblico de cercanía e involucramiento paternal. La responsabilidad de enseñar principios, justicia y compañerismo no es de las guarderías y escuelas, tampoco de las nanas o entrenadores. Los encargados de cuidar, enseñar y guiar son los padres.

Dios nos ayude en Su gracia a ser hombres y mujeres presentes en la vida de los hijos y nos permita transmitir enseñanzas que impacten positivamente, formando principios y carácter que honren al Señor.